Me cuesta acostumbrarme a estas cosas... Siempre cuando alguien es importante entra en mi vida comparto todo, quedo vulnerable y creo que algunas personas se aprobechan de eso,una pena, pero es la realidad... No soy persona de guardar rencores innecesarios, no los tengo y además no los quiero.
Estuve transitando en estos meses una etapa en que mi vida sentimental ni siquiera me importaba, no me gustaba nadie, no hechaba de menos a nadie, no quería estar con nadie.
Creo que aún tengo recuerdos y silencios que me dejan demasiado triste. No tiene mucho sentido, pero es asi; Cuando pasan epocas de pena, de tristeza, de frustración, de decepción llegan estas en las que lo último que el alma desea es volver a meterse en otra relación y se levantan paredes, muros y escudos inconscientes, mecanismos de defensa para no volver a ser dañada, para recuperarse del todo y sin darnos cuenta, se cierra la puerta a cualquier otra relación que no aparece porque no es deseada.
Es un tema diario en mi mente, aunque con frecuencia pase desapercibido por mi atareada rutina, pero hay ratos, estados de ánimo y días nublados en los que tengo estas reflexiones y me pregunto hasta cuando voy a estar en esta situación, por qué me metí en ella y cuales son sus salidas...
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